Historia de la Lógica Transcursiva (Capítulo 118)

Cuaderno V (páginas 705 a 710)

(Hoy vamos a abordar otros detalles del proceso de fecundación, desde el punto de vista lógico.)

Según lo habíamos dicho hace dos capítulos atrás, existen 6 emergentes (E), de los cuales, 3 son dextrógiros (Dx), y 3 son levógiros (Lv); a lo cual agregamos: existen también 6 gametas (G), de las cuales, 3 son Lv y están originadas en los E Dx, y 3 son Dx y están originadas en los E Lv. (figura)


El apareamiento entre Gs. se produce entre las del mismo sentido de giro, pero no entre Gs. iguales. El sitio de unión entre las Gs es donde los elementos de ambas son complementarios (se atraen); esto obliga a la segunda G a ubicarse de tal forma, para enfrentar el polo complementario, que invierte su sentido de giro. Cuando intentan la unión dos Gs. iguales, hay cambio de foro pero no enfrentamiento de complementarios, por lo tanto, no hay apareamiento, y si lo hubiera, el resultado sería el aniquilamiento (000000). (figura)


El E resultante del apareamiento es uno que tiene el mismo sentido de giro que la segunda G y su secuencia comienza en el mismo lugar. Esto muestra la existencia de polos complementarios: (S) y (O). (figura siguiente)

 Lo anterior permite construir una 'matriz de apareamiento como la que muestra la figura siguiente.


Una operación equivalente es reemplazar la contradiagonal por su complementaria (⊽⊽⊽ → VVV) y transponer la matriz. (figura)


Todo E tiene una G que es su complementario, tanto en los nodos como en su sentido de giro. (figura)


La suma del E y su G origina una estructura primigenia (VVV); la suma de idénticos (tanto Es como Gs) produce el aniquilamiento (000000 → ⊽⊽⊽). La suma de dos estructuras primigenias también produce aniquilamiento. (figura)


El giro en la G comienza en el complementario del E en el que comienza su giro, y en sentido inverso. Las Gs tienen la mitad de polos 1 que los E (equivalente a una célula haploide). Al unirse dos gametos completan el número de 1s a 4 (equivalente a una célula diploide) en el E formado.
La gametogénesis se produce por meiosis de un E adulto y esto ocurre en ciclos aleatorios. (figura)

Se describe el proceso genérico que es igual en ambos tipos de Es. El proceso comienza con la pérdida del polo inferior del E (1 en Dx y 0 en Lv). La estructura abierta restante produce una copia complementaria que se alinea y liga (en forma laxa) en la parte inferior de la estructura original. Se unen los extremos complementarios y siempre surge (en el lado derecho de esta estructura compuesta) un elemento S (según sentido de giro). La columna vertebral de esta estructura compuesta es una subestructura dipolar, regida como todo elemento constitutivo, por una escala de 0 a 100% del grado de pertenencia, y que está condicionada por el entorno. (figura siguiente)

El 100% está arriba en los Dx y abajo en los Lv; esto es por el sentido de giro.
Cuando el ºG de pertenencia llega al 50%, la estructura compuesta gira 180º (su polo inferior) tomando como pivote este punto, originándose una estructura en '8', cuyas dos mitades tienen ahora sentidos de giro opuestos.
En el cruce surgen polos idénticos al del extremo de cada hemi-estructura, produciéndose así la separación de un E idéntico al origen y una G que gira en sentido opuesto. La unión de dos Gs. con igual sentido de giro, como ya hemos visto, originará nuevamente un E adulto y el proceso seguirá así hasta el ∞.

Se puede observar que el genotipo no es lógicamente deducible del fenotipo, una de las condiciones que definen a los seres vivos. (figura)


Las gametas son los complementarios de los emergentes. (figura)


Podríamos describir un proceso genérico de gametogénesis. (las dos figuras siguientes)



También es posible definir una función de gametogénesis, la que mediante una ecuación de regresión determina, a través de los grados de giro, el porcentaje del ºG de pertenencia. (figura)


Podemos, incluso, imaginar un 'registro' por medio del cual se pueda individualizar cualquier E y cualquier G. Ese registro contaría con 8 lugares, de los cuales, los dos primeros (de la izquierda) constituyen la 'cabeza' (el extremo izquierdo indica el tipo de registro: 0 = E y 1 = G, mientras que el que sigue nos dice sobre el sentido de giro: 0 = Dx y 1 = Lv). Los siguientes 6 lugares constituyen el 'cuerpo' de este registro y allí se disponen, binariamente, el E o la G correspondiente. (figura)


Operando con estos registros podemos demostrar, como se hace en la parte baja de la figura anterior, que, si realizamos una operación XOR entre dos E consecutivos (de igual sentido de giro), y sus respectivas Gs. obtenemos el mismo E. Esto confirma que los E consecutivos son complementarios.

Existen dos niveles de complementariedad. Están los elementos o procesos 'complementarios lógicos' (gametogénesis - apareamiento) que son de índole binario (SVO → O⊽S), y aquellos que son 'complementarios relacionales' (ADN psíquico - división celular) que dependen del orden de disposición de los elementos en el conjunto. (SVO → VOS → OSV → SVO)

Finalmente, proponemos una equivalencia 'logica' del proceso de transcripción y traducción del ADN biológico, pero en el ADN psíquico. (figura)


[Se debe destacar el grosero error cometido en la figura, en la disposición de las valencias, que se supone representan el valor decimal (convertido desde el binario) que representa cada elemento, según el siguiente detalle: S = 1, O = 2 y V = 3. Como vemos en la figura, S = 4, O = 3 y V = 5, lo cual es un grave error. Esto se solucionará mucho más adelante cuando se descubra que la única forma de hacer coincidir las valencias con los códigos, es incluir en la estructura un elemento más: ⊽ cuyo código será igual a 0, y que oficiará a modo de un carbono cuaternario biológico.]

¡Nos vemos mañana!